Y respondieron. El candidato a la
Municipalidad de Huamalíes, Ricardo Prado, al ser consultado por el caso Plan
Vaca, que dice es el único proceso en su contra, alegó que otros personajes
también deberían responder. El hermano de
su actual contendor, Wily Bajonero, Arturo y Edwin Trinidad Rojas, familiar del
alcalde Ciro. En las indagaciones de Desde la Torre, nos sorprendió
enterarnos que por artes mágicas el
proceso judicial se quebró, y quién sabe, los responsables del regateo de
las costosas vacas puede quedar impune.
Prado sostiene que no tiene responsabilidad en la desaparición de las diez vacas - Composición: Yonel Rosales |
Más en un clic:
QUIERE SER ALCALDE DE PAITA PERO POSTULA EN LLATA
Por Yonel Rosales
Justicia que tarda no es justicia. Cerca de doce años demora el proceso judicial por el caso Plan Vaca, proyecto
piloto de producción láctea en Llata de la Municipalidad Provincial de
Huamalíes, el cual tiene, entre los principales
protagonistas al actual candidato al sillón municipal, Ricardo Prado García,
a quien siempre se le achaca la responsabilidad por este hecho, que no solo terminó
en un fracaso, sino también, alguien o alguienes (Toledo dixit) varios
exfuncionarios metieron las uñas, allá por el año 2007, y fueron acusados por
los delitos contra la administración pública en su modalidad de colusión y
peculado. (el término se usa para choros de saco corbata)
Vacas que costaron 54 mil soles, lo remataron a 15 mil - Imagen: Captura |
En un largo diálogo con Prado,
quien por ese entonces era el jefe de Abastecimientos de la comuna huamaliana, reconoció
que su responsabilidad se reduce al proceso de compra de las diez vacas de raza
Holstein, valorizadas en 54,834.99, más no en la desaparición de los mismo
animales, regateados a quince mil
soles. En el proceso, también tendrían parte Arturo Bajonero Olivas,
hermano de su contendor Wily Bajonero, porque estuvo encargado de la construcción
e implementación del proyecto en Cochas, asistencia
técnica, manejo de pastos, de acuerdo al contrato por locación de servicios de
la comuna, del año 2007.
El contrato de locación de Arturo Bajonero - Imagen: Captura |
Para el ahora candidato por Alianza para el Progreso, también
deberían responder el exregidor Edwin Gilmer
Trinidad Rojas, brother del cuestionado alcalde Ciro, quien según el requerimiento
del 15 de noviembre del 2007, firmado por exgerente municipal, Guido Delgado
Chirinos, recibió viáticos para viajar a Lima, conjuntamente con su colega extinto
Luis Benavides Seguil, a fin de fiscalizar
la venta de los semovientes.
Dos regidores participaron como fiscalizadores de la venta |
Más en un clic:
MUERTE DE OBRERO ESTÁ EN INVESTIGACIÓN
LA CONFESIÓN DE LA
VAQUITA LECHERA
“El error de querer hacer grandes cosas por nuestro pueblo,
imbuidos de entusiasmo de querer hacer un proyecto”, fue la única falta reconocida
por Ricardo Prado, ya usted sabrá creerle o no sin embargo, al parecer, de acuerdo a varias versiones, él y los
demás a cargo del ambicioso proyecto, nunca hicieron caso a las advertencias hechas
en su momento.
En una declaración jurada, de agosto del 2010, la denunciada Antonia Aguilar Aguilar, dueña
de la empresa “La Vaquita Lechera”, afirmó que les previno a los representantes
de la comuna de Huamalíes, que las
vacas por comprar no podrían vivir en la altura, mejor era que busquen
otros animales de raza más resistente como para Llata, sin embargo, hicieron caso omiso y compraron las diez vacas en preñez en
más de 54 mil soles. Después de seis meses la llamaron para comunicarle que
los semovientes están enfermas y querían devolverlas, lo cual no aceptó, pero
ante la insistencia terminó con acogerles en su establo.
Mediante documento, vendedora revela cómo se hizo la compra venta de las vacas - Imagen: Captura |
Luego que se recuperaron, se llevaron y vendieron ocho animales a Ernestina Venancia Auqui Chávez,
a un precio irrisorio, quince mil 500 soles, pese a que las vacas producían 190
litros de leche al día, luego que en Llata cayeran a una producción de 18
litros. Este regateo, pues según las cotizaciones de ese tiempo en Agropecuaria
Santa Rosa, Establo Calixto Milk, entre otras, cada uno de las vacas no bajaban de los cinco mil soles;
según identificó Antonia Aguilar, Ernestina
Auqui, coludida con el exgerente Guido Delgado, y los testigos Luis Benavides y
Edwin Trinidad, remataron los animales, a más o menos S/. 1937.5 cada uno.
Más en un clic:
FELIZ CUMPLE: UN AÑO DE ABANDONO
DEVUÉLVAME MIS VAQUITAS
Como ya se estarán dando cuenta, el hombre orquesta en la venta
de las vacas, era Guido Delgado. En
junio del 2010, el procurador de la Municipalidad de Huamalíes, Raúl Vergara
Rubín, halló el original del contrato
simple hecho por el exgerente en un cuaderno de hoja cuadriculada, en el que “tachó las líneas en las que aparecía el monto de la transacción,
diciendo que no tenía importancia considerar el precio en el documento”, el
valor de quince mil soles. Pasado algunos días, los mismos funcionarios le
piden nulidad de la compra venta, al cual se negó la compradora Ernestina Auqui. También en
una declaración jurada, Auqui Chávez, ratifica la misma versión, destaca que la venta lo hizo mediante trato directo con
el alcalde Quino Herrera, funcionarios y regidores, a quienes responsabiliza de
los borrones en el documento.
Procurador presentó prueba que demuestra que tacharon el precio de las vacas - Imagen: Captura |
La propia compradora Ernestina Auqui, relata cómo le vendieron los animales - Imagen: Captura |
De acuerdo a los documentos al que accedimos, a raíz de todos estos hechos, descubrimos que inicialmente eran investigados por el delito contra la administración pública, en su modalidad de colusión: Eduardo Quino Herrera, Arturo Bajonero Olivas, Guido Delgado Chirinos, Ricardo Prado García, Walter Majino Laguna, Desidorio Osorio Esteban, Santiago Carhuapoma Caqui y Victoriano Fonseca Caqui.
Atestado inicial por el delito de colusión - Imagen: Captura |
Y por la modalidad de peculado:
Roy Peña Asencios, Juan Velasquez Alvarado, Edwin Gilmer Trinidad Rojas, Guido
Delgado Chirinos, Eduardo Quino Herrera, Luis Benavides Seguil y Carlos Chávez
Firma. Este último que continúa como funcionario en la comuna y hace
periodismo, negó rotundamente estar inmerso en el caso, tampoco fue procesado,
según dijo.
Atestado inicial por el delito de peculado - Imagen: Captura |
Más en un clic:
SOLO LO QUE QUEREMOS OÍR
HACE ONCE AÑOS LE DEBEN
SIETE MIL SOLES
Los aludidos respondieron. Arturo Bajonero Olivas, confirmó que efectivamente el desaparecido
alcalde Eduardo Quino y Ricardo Prado solicitaron sus servicios profesionales para
el proyecto Plan Vaca, razón por la cual se encuentra en calidad de testigo
secundario en el proceso judicial. Entre las primeras cosas que informó fue que
no había condiciones para esta inversión. “Habían
hecho una desgracia, todo era antitécnico, quedamos en que subsanarían pero no
lo hicieron”, afirmó. No obstante a sus advertencias, continuaron con la
compra de los semovientes por 54 mil soles, con un cheque que salió a nombre de
Prado García, la versión de Trinidad también coincide en este punto.
El aludido Arturo Bajonero, contó que hasta la fecha le adeudan alrededor de siete mil soles - Foto: Facebook |
Negó toda responsabilidad respecto a la compra o venta de los
animales. “No tenía ninguna atribución
para la cotización ni ningún contrato”, afirmó. Recordó que fue contratado
por tres o cuatro meses, no obstante, aproximadamente
a los quince días de llegado las vacas limeñas a Llata, ya no tenía contrato.
“Cuando iba a cobrar mi sueldo, me
decían que no tenían presupuesto”, rememoró. Ni para los animales se compraba
los alimentos ni medicamentos. A tal punto que las pobres vacas quedaron
abandonas, él mismo debió costear los alimentos, dice Arturo. La comida
preparada de su criadero de cerdos tenía que compartir con las lecheras, con la
promesa de los funcionarios de la comuna, que le reconocería todos los gastos.
Pasaron más de once
años, pero hasta la fecha no le pagaron sus sueldos, ya ni recuerda cuántos
meses. Tampoco le reembolsaron
de los alimentos y el cuidado de las vacas, “yo seguí ayudando nada más porque es mi tierra”,
enfatizó. Aproximadamente siete mil soles le adeudarían,
los mismos a los que ya le echó tierrita. “Si fuera por manchar a Ricardo
Prado, diría que sí, pero sé que no participó”, contestó a nuestra pregunta, si
en la venta de las vacas tuvo parte el candidato Ricardo Prado.
Al parecer la comuna es el arca favorito de cazadores de tesoros - Foto: Yonel Rosales |
ES PRODUCTO DE NUESTRA
FISCALIZACIÓN
“Hemos cumplido nuestra función como tal”, respondió Edwin
Trinidad Rojas, al ser consultado por el caso. Descartó ser parte de las
irregularidades del Plan Vaca, cartelón que por largos años lo tiene puesto
Ricardo Prado, por lo contrario, sostuvo
que la denuncia es producto de labor de fiscalización, junto al desaparecido Luis
Benavides, a quien defendió, según dice, por ser uno de los escasos regidores fiscalizadores.
Siempre objetó la implementación, la organización administrativa, técnica, que no
tomaron en cuenta. “El mal de altura fue el fracaso de los animales”, aseguró, a
tiempo de recordar, que no es procesado.
Más en un clic:
EL RETORNO DE LOS “ROBA PERO HACE OBRA” II
VUELVE A CERO
En el seguimiento que hicimos a este caso, la curiosidad mató
al gato que nos generó por las reiteradas alusiones en contra de Ricardo
Prado, nos enteramos, que ¡oh, vaya
casualidad!, el proceso por el Plan Vaca, se quebró, por lo que el juicio tendrá
que empezar de cero. Si como se ve, son injustos con el pobechito de
Prado porque aparentemente nada tuvo que ver en la desaparición de las vacas, ¿por qué terminaron por involucrarlo?, “el
gran error mío, fue que yo me fui a Monzón a trabajar, luego de los problemas y
conflictos sociales que se presentó en la provincia de Huamalíes, tras el
asesinato del alcalde (Quino Herrera)”, respondió, en esa etapa habrían aprovechado
para cargarle toda la culpa. Pero no
soslayemos, que el cheque por los 54 mil soles, según los consultados, salió a
su nombre, lo cual sería ilegal.
Proceso se cayó y deberán reiniciar para sentenciar a quienes resulten responsables - Foto: Correo |
La paquidérmica justicia, algún día dará su veredicto. Si es que
no se archiva el caso, conoceremos con qué finalidad pero ustedes ya saben
Guido Delgado, a quien recién recuerdo haberlo tratado cuando fue gerente de
Planificación del Gobierno Regional de Pasco, por qué borró el monto de la venta de las vacas y hasta dónde llegan
las responsabilidades de Ricardo Prado.