“¡QUÉ MIERDA SE CREE LA GENTE ACÁ!” - Desde la Torre

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lunes, 1 de febrero de 2021

“¡QUÉ MIERDA SE CREE LA GENTE ACÁ!”


El lenguaraz gerente de la Municipalidad de Huamalíes, Néstor Aguirre se habría topado con la horma de su zapato, una joven que ha emprendido una lucha de David contra Goliat. Sus “altos” directivos, al parecer, ya concertaron para negar todo lo visto, escuchado y actuado en torno al maltrato contra la exasistente de la Gerencia de Administración, Andrea Dávila, que venció sus miedos, y decidió denunciar ante la Fiscalía al gerente, más conocido como “Pony” (animal testarudo), el destacado hombre de confianza del alcalde Ricardo Tello, designado en ese puesto por sus “altas cualidades” reconocida por la población llatina. Cualidades, que las usaría como para mandar a la mierda a sus subordinados.    

El gerente Néstor Aguirre, conocido como Pony, ¿su carácter y comportamiento coincide con la testarudez del animalito? - Composición: Yonel Rosales

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Por Yonel Rosales

La Fiscalía ha citado para este 4 de febrero a los implicados en el presunto trato humillante que habría dado el gerente de la Municipalidad Provincial de Huamalíes, Néstor Aguirre Daza, luego que el lunes 21 de diciembre “reventara el chupo” de Andrea Dávila Santamaría, quien venía aguantando los sucesivos maltratos verbales y económicos de parte del funcionario de “altas cualidades”.   “¡Qué mierda se cree la gente acá!”, habría proferido el conocido lenguaraz, luego que la asistente de Administración, se negara recibir un documento con fecha pasada, del viernes 18.

En diálogo con Desde la Torre, la víctima del hostigamiento laboral, contó los hechos que motivaron esta titánica lucha contra el todopoderoso Pony, quien se jacta repetir: “¡no sabes con quién te has metido!”, por el hecho que Andrea se atrevió hacerle el pare a su trato humillante. Los roces ya se habían dado meses atrás, desde cuando la asistente iba a conseguir un aumento, según cuenta Dávila, “vi una violencia constante, no de manera física. Desde el año pasado, desde el 2019 en que laboraba”, afirmó.  Dice que había un acuerdo de subirle el sueldo a S/. 1500.00, 300 más, casi para nivelarla con otras simpáticas señoritas que “sin siquiera tener estudios” ganan S/ 1800.00, pero cumplen la misma función, de redactar, registrar, llevar documentos. Sin embargo, al enterarse el gerente Aguirre, con la orden de servicio ya elaborado, acudió a logística impedirlo. “¡Qué mierda hacen acá (las asistentes). De lo que registran documentos van a ganar tanto!”, logró escuchar Andrea cuando Pony dejaba sin efecto el ansiado aumento. Ese ambiente de indirectas, con afirmaciones coprolálicos por parte del funcionario de más alto rango de la comuna lo aguantó con mucho temor, hasta que llegó el día.

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Andrea Dávila, dice que el viernes 18 pidió permiso verbal al jefe de Recursos Humanos, pese a ser contratada por terceros. - El Estado es el primero violar las normas laborales, mientras da pingües gollerías a algunos nombrados, como en las municipalidades, de ahí la importancia de la reciente derogación por parte del congreso actual de la norma que ponía límites a la negociación colectiva. - Ella viajó a recoger su título de estudios. El lunes 21 cuando retornó al trabajo, la secretaria de gerencia Gisela Sudario, le solicitó presentar un documento, pero con fecha 18. Como se negó consignar la fecha pasada, le advirtió que es la orden del gerente, no obstante, no aceptó.

El gerente Néstor Aguire, cuenta la víctima, retornó molesto. Incluso ni le contestó el saludo parece que a alguien sus papas no le enseñaron a saludar. “¡Quién diablos te crees tú. Acá se hace lo que yo mando!”, “¡No sabes con quién te has metido!”, habría proferido, según lo poco que recuerda Dávila Santamaría. “Le reclamé que no puede gritar, estamos tan cerca que puedo escucharlo. Le dije que no se recibe documentos con fecha pasada porque la ley me lo impide”, narra. 

Andrea Dávila emprendió una pelea contra su presunto victimario - Foto: Facebook
 

Luego de la valentía de tratar de hacerle un alto al gerente. Y tras advertirle que no sabía con quién se metió, continuó profiriendo su enriquecido verbo coprolálico “Qué mierda se cree la gente acá”, habría dicho, humillándola frente al resto de los colegas que ya habían parado las orejas por la rezagante voz de la mano derecha del alcalde Ricardo Tello. Efectivamente, al día siguiente de la discusión, llegó un memorándum dirigido al gerente de Administración, Adolfo Espinoza Victorio.

“Solicito despido y/o separación del cargo de la asistente…” señala el documento N° 037 que logró captar la víctima. “Le comunico a usted (Adolfo) en el término del día deberá tomar acciones administrativas en la destitución y/o separación de su centro de trabajo en el término del día, a la señorita Dávila…, por incurrir en acto de violencia, grave indisciplina o faltamiento de palabra en agravio de su superior del personal jerárquico y de los compañeros de labor.” A reglones seguidos, el gerente Aguirre, no muy seguro de sus atribuciones, arguye que tiene facultades por la resolución tal, alega que las personas que laboran por locación de servicios no tienen vínculo, añade que la Ley de Servicio Civil no es de aplicación en el caso.

El memorándum que Andrea logró obtener, pidiendo que la destituyan en el día 

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Si el conocido Pony escribió este documento, es que está más perdido que cuy en tómbola. Es un contrato de locación y no amerita un documento de este tipo. Todavía dice, que la contratación del personal debe ser por concurso conforme a Ley, para no fomentar actos negativos “que deshonran y manchan la imagen de nuestra institución”, el burro hablando de orejas. ¿El gerente Néstor Aguirre se ha visto la viga en el ojo, antes de ver la paja en el ojo ajeno? Finaliza, amenazante, que Adolfo Espinoza debe cumplir “bajo responsabilidad” y comunicarle documentadamente. ¡Habrá se visto!

Si así fuera, como dice el memorándum, con firma de Néstor Aguirre, calificándola de violenta, irrespetuosa, ¿cómo se explica que el propio alcalde Ricardo Tello, lo haya felicitado por su destacada labor? Incluso llegó a entregarle un documento de felicitación. La resolución de alcaldía N° 361, resuelve: “Felicitar… por su destacada labor al servicio de la MPH, demostrando su desempeño con criterio, eficiencia, responsabilidad e identidad”. Por eso, de acuerdo a Dávila, intentó conversar con el titular del pliego, para denunciar los maltratos, pero sus guardaespaldas le impidieron ingresar. “Le agradezco al alcalde, pero hay personas que le hacen quedar muy mal”, subrayó.

La resolución del alcalde Ricardo Tello, felicitándola a Andrea y otros trabajadores

En esos días se vino navidad, el lunes 28, volvió al trabajo, creyendo que laboraría hasta el 31 de diciembre según el contrato, no obstante, la retiraron. El gerente de Recursos Humanos, Carlos Chávez Firma, le pidió que se retire, con un comentario  de pesar: “alguien tiene que asumir la responsabilidad de sus actos”, le habría dicho. “No olvido sus palabras solidarias”, afirmó Andrea Dávila. ¿El gerente puede maltratar al personal y la víctima es la que paga los platos rotos?  

En el documento destaca que la joven tiene una destacada labor

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EL ANIMAL PONY

Para aquellos que desconocen, pony es un animal, una especie enana de caballos. “Pichi bestia”, lo diríamos en nuestros lares. De acuerdo a la descripción de la página Okdiario, los ponys “tienen un carácter muy fuerte y testarudo”. Habría sido interesante dialogar con el gerente Néstor Aguirre, a qué se debe el apelativo de Pony. Si su comportamiento se condice con la testarudez de los ponys, pero no fue posible, se negó a darnos su versión, adujo que estaba ocupado. Ni siquiera quiso respondernos una sola pregunta que le dejamos al Whatsapp. Recordemos que en una ocasión, tampoco quiso que le entrevistáramos en su oficina, pese a que íbamos hablar de temas menos comprometedores.

En cambio, los otros actores, que lo conocen, nos dieron su testimonio. El gerente de Administración Adolfo Victorio, dijo que este incidente con la señorita Dávila, se produjo antes que llegara él, por lo que no le consta el trato humillante, después se enteró de los hechos. También contó que se habría pretendido registrar un documento con fecha anterior, pero finalmente registraron con fecha que le correspondía. Aunque dijo no recordar de qué documento se trataba, Andrea nos comentó que eran papeles referidos a contrataciones que tenía fecha límite. 

Espinoza, negó que el memorándum haya ingresado a su despacho, “no tengo notificación”, dijo y deslizó la posibilidad que sea un documento apócrifo.  Lo negó todo. Como en esta página pensamos mal, le preguntamos, ¿no será que ya se pusieron de acuerdo?, “No, no hay necesidad de ponernos de acuerdo”, dijo obviamente. Subrayó que en un contrato de locación, simplemente se termina la prestación de servicios al finalizar el plazo, esa sería la razón de la salida de su asistente. Respecto al maltrato que da el gerente Aguirre al resto del personal, manifestó que no le consta, pero le comentaron en los pasillos, que él grita, que siempre es así. Se animó a decir: “él tiene una forma… es muy tosco para dirigirse. Utiliza términos de pronto fuertes”, contó.

Sin embargo, para el jefe de Recursos Humanos, Carlos Chávez, Néstor Aguirre sería como un pan de Dios. “No he presenciado maltratos”, dijo. Consideró que es subjetivo, la afirmación de Andrea Dávila, pues “ella dice una cosa y los testigos dicen otra cosa. No concuerda con lo que dice la señorita”, contestó. Apelamos a los largos años que lo conoce, y dijo, que nunca hubo maltratos. “Por lo menos cuando yo estoy, no tengo ninguna queja de maltratos”, acotó. También negó que le haya dicho las palabras solidarias a Andrea, cuando le pidió que se retire. Coincidió que la joven dejó de laborar porque terminó su contrato. Desconoce el memorándum.   

Néstor Aguirre, no quiso dar su versión, así como anteriormente tampoco quiso que lo entrevistáramos en su oficina - Foto: Yonel Rosales


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TODOS LO CONOCEN

“Él tiene conocimiento de los muchos maltratos y la expresión del señor Néstor”, señaló la víctima de las humillaciones, Andrea Dávila, en referencia al jefe de Recursos Humanos. “El trato que tiene hacia a las personas es de manera vulgar, grotesca”, acotó. Refirió que hay varios compañeros que quieren testificar, pero tienen miedo, porque perderían el trabajo. El resto de las víctimas no se animarían a denunciar al gerente, porque lo temen cual al perro rabioso, a la primera se expresa con “términos vulgares, que un profesional no debe usar”, dijo. Sobre, tanto Carlos Chávez como Adolfo Espinoza, desconocen los hechos, sostuvo que quedará en sus conciencias.   

Tratamos hallar a qué se debe el ensañamiento de Néstor con Andrea. Quizás no accedió en algún requerimiento. ¿Te acosó sexualmente?, interrogamos a la víctima de trato humillante, “me mantengo en silencio”, fue su respuesta.  La pregunta nace por los rumores en torno a otras señoritas.

Consultados para esta nota, afirmaron que Néstor Aguirre, está acostumbrado a ese tipo de tratos. La regidora Gloria Ceferino, no dudó en afirmar que el funcionario de “altísimas cualidades” se expresa soezmenteOtras personalidades, que pidieron mantener sus nombres en reserva, dijeron que todos los conocen, ¡quién es Pony!  

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