PASARON 12 DÍAS Y EL ALCALDE EDGAR
CÉSPEDES NO ME DEVUELVE MI GRABADORA QUE ME QUITÓ
EN LA MUNICIPALIDAD DE HUAMALÍES, EN UN ACTO PROPIO SOLO DE LADRONES.
“La mayoría del tiempo, los animales huyen o
atacan cuando se les asusta o sorprende o si están hambrientos o enfermos”, es
la primera respuesta que me da Google cuando hago esta pregunta a raíz del arrebato
y agresión del alcalde de la Municipalidad de Huamalíes, Edgar Céspedes. Vamos
a intentar responder esta pregunta desde el punto de vista periodístico y con
un caso práctico de total ignorancia del secretario general, Abdías Jara, quien, al sostener
idioteces es salvado por la serena. Pueden ver en video. Esta fue la imagen que acompañó a la nota que le generó la rabia al alcalde Céspedes, cuando le pusimos al descubierto al alcalde mentiroso - Composición: DlT
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en un clic: ¡SÉPTIMO
MANDAMIENTO! EDGAR CÉSPEDES DEVUÉLVEME MI GRABADORA
Por Yonel Rosales
La irascibilidad del alcalde de la Municipalidad Provincial
de Huamalíes, Edgar Céspedes Salas, para agredirme y quitarme mi grabadora el jueves
18 octubre, sin que le haya hecho algo ese momento, cuyo acto considero como la
reacción de una bestia, responde a que le puse al descubierto. Las bestias
atacan cuando están acorraladas. En la pre y campaña electoral fui el único periodista
que investigó y reveló al vil mentiroso, al entonces candidato. En el 2021 estaba
inmerso en la volcadura del tractor oruga del distrito de Puños, mi tierra, la maquinaria
lo lleva en horas de la noche para una obra con irregularidades halladas por la
Contraloría, a la altura de Torre Gaga terminó por volcar. Cuando mis
fuentes me datearon que el precandidato tenía arte y parte, le llamé
directamente a él, pero lo negó. Escudriñar este caso generó su odio contra
este periodista. Meses después, tras investigar, descubrí fehacientemente que Edgar
Céspedes mentía.
“Uno, no tengo empresa. Número dos, yo no tengo ni trato ni
contrato con el distrito de Puños ni con nadie sobre esa oruga”, fue la
respuesta de Céspedes cuando lo entrevisté tras la volcadura del tractor oruga, (MIRA EL VIDEO Y ESCUCHALO) no es que yo le haya creído, no tenía pruebas para rebatirlo, así que en la publicación ni lo
mencionamos. Muchos meses después, investigando encontré los documentos que
acreditan que sí tenía trato y contrato. Por lo que, como hacemos siempre esta
página, llamé al ahora alcalde para confrontarlo por qué nos mintió. “No
quiero hablar contigo, porque no vengas con cizañarías. No quiero faltarte el
respeto. Ten mucho cuido de lo que hablas…”, fue la respuesta agresiva y
amenazante. Desde entonces, alimentado por mis constantes destapes y
críticas – en el ejercicio de MI DERECHO DE OPINAR – a su gestión el señor anda
incubando una rabia contra este periodista.
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en un clic: EL GUARDATITO:MENTIR DESCARADAMENTE
Para que los alcaldes actúen de forma tan baja, haciéndola de
matón, creyendo que la municipalidad es su chacra cuando yo nunca me metí a su
casa, responde a cuatro factores elementales: 1, vivimos en un ambiente cucufato
en torno a la cosa pública, donde el hablar a media voz, la falta de
transparencia es la regla. Existe mucho hermetismo. 2. En nuestra serranía todavía
prevalece la voluntad del más fuerte, las personas más humildes están sometidas
por temor al golpe o a la muerte. Podríamos citar no tan lejanos, la matanza de
una familia en Chavín de Pariarca, la quema de dos visitantes en Andas (Jacas
Grande) o el desalojo violento de una familia campesina en Singa, cuya cultura,
visión de imponerse por la fuerza, y no por la razón, va a tomar mucho tiempo en
ser desarraigadas. 3. Llata o la provincia Huamalíes, casi como todos los pueblos
alejados del mundo mediático no está acostumbrado a la fiscalización ácida del
periodismo a las autoridades, por ejemplo, no tienen todos los días un reportero
haciendo preguntas y publicando lo que no quisieran que se sepa, lo que yo hacía
todos los días en mis anteriores trabajos. Y 4. La mayoría de veces los
alcaldes se rodean de profesionales y regidores mediocres, que están ahí por defender
su sueldo o ganarse alguito con no fiscalizar. Eso sucede en todas partes, pero
en pueblos lejanos como el nuestro es peor.
Que el abogado secretario general Abdías Jara no conozca lo más básico del derecho a la libertad de expresión, es el colmo - Foto: Yonel Rosales
Un caso práctico del punto cuatro es el siguiente diálogo con
el abogado Abdías Jara Espinoza, secretario general de la Municipalidad de
Huamalíes, nótese
que antepongo su condición de jurista:
Abdías Jara (AJ): Ud. Viene como, como… quien tomar un asalto,
algo así.
Yonel Rosales (YR): Cómo puedo tomar un asalto, es una institución
pública
AJ: Ya habíamos terminado el acto
YR: Es una institución pública… ¿y eso amerita una agresión?
AJ: Puedo tomar fotos, puedo participar, hay que tener maneras,
Ud. Entra prepotente..
YR: ¿Pero he tomado una foto, eso prepotencia?
AJ: ¡Pero para qué, con qué fin!
YR: A ver, a ver. Ud., es abogado ¿no?
AJ: Sí, así es
YR: A un periodista le puedes decir con qué fin
AJ: Por eso…
YR: ¿Le puedes decir?
AJ: Sí
YR: Oiga, ¿Ud. Conoce la libertad de expresión?, ¿artículo 2
de la constitución política?
AJ: Lo que quieras puedas argumentar mil cosas
Que un abogado argumente o balbucee esta pachotada casi, casi
me desmaya. Se supone que el profesional formado en leyes conoce al derecho y
al revés los derechos constitucionales. De repente los años o quién sabe en qué
universidad estudió y nunca leyó este parrafito. Artículo 2, inciso 4 de la CPP,
“Toda persona tiene derecho: A las libertades de información, opinión,
expresión y difusión del pensamiento mediante la palabra oral o escrita o la
imagen, por cualquier medio de comunicación social, sin previa autorización ni
censura ni impedimento algunos, bajo las responsabilidades de ley”. Habría
que recalcarle a este abogado que en ese momento me estaba censurando: sin
previa autorización ni censura ni impedimento algunos. Derechos
constitucionales. Le puedo sugerir leer el manual de la Defensoría del Pueblo
para ejercicio Este tipo de
profesionales qué le van saber orientar adecuadamente a un alcalde con estudios
inconclusos.
En la discusión que teníamos, donde yo no sabía que
responderle a Abdías Jara, por la tremenda idiotez que acababa de decir en su
condición de abogado,
fue (o fui) rescatado por un efectivo de serenazgo, una femenina, que dijo que
mis derechos solo se respetan en horario de oficina. Ya después del horario
de oficina te podemos pegar, matar, etc. En ese lío que tenía con los serenos
después que el alcalde Edgar Céspedes me quitó mi grabadora, interviene el
regidor Arturo Bajonero, dejándoles claro que yo sí, podía participar en la sesión
del concejo, pero que ya había terminado. Yo me enteré al llegar a la sala
de regidores.
He señalado cuatro factores que condicionan la agresividad de
los alcaldes y funcionarios públicos, que muchas veces reaccionan como
incivilizados. Por lo que me he propuesto civilizarlos, aunque ya lo hago
hace años, porque quién como este periodista hizo destapes que los políticos o
ladrones de turno querían que se mantenga en silencio, al verse
descubiertos reaccionan como Céspedes.
Yo que vengo del mundo del periodismo donde los siete días de
la semana esa era mi chama, y al retornar a mi tierra, choco con los
incivilizados, con los dueños de las chacras que en realidad son
municipalidades, con tipos que se creen señores feudales, cada tanto iré
explicando cómo se hace prensa. Por ejemplo, el jueves 18, cuando ingresé a
la sala de regidores y tomé mi única foto, no me voy a poner a saludar voz en
cuello a los presentes interrumpiendo sus diálogos. Cuando alguien graba un
video, los periodistas nos agachamos, porque le respetamos y conocemos la
importancia de su labor, a cualquier persona común no le importa e incluso se
para enfrente tapándote todo.