La yunza del Barrio San Francisco de Llata, casi ocasiona una tragedia la
tarde del domingo último, cuando le cayó
el árbol a Wilfredo Inga, quien quedó gravemente herido, con fracturas y contusiones.
Mientras su madre lloraba desconsolada al no poder costear los gastos para su
curación y por su hijo inconsciente.
Pesado árbol de yunza casi mata al joven - Foto: Yonel Rosales |
Por Yonel Rosales
La alegre costumbre de las yunzas
por los carnavales en nuestros pueblos, casi termina en una irreparable
pérdida, cuando aproximadamente a las
7:00 p.m. del domingo último, los bailantes del Barrio San Francisco, tumbaron
el árbol, que cayó sobre Wilfredo Inga Ávila (22), dejándolo gravemente herido,
y con múltiples contusiones, producto de la algarabía de la turba que fue a
quitarse los adornos del árbol sin considerar que el joven se encontraba debajo.
Inmediatamente, ante la alerta de
los que se percataron del accidente, los efectivos de Serenazgo de la
Municipalidad Provincial de Huamalíes, acudieron para tratar de controlar la
situación. Sin embargo, la turba cesó su alegría cuando se acabaron los adornos
del árbol, recién pudieron rescatar al herido, a quien llevaron de emergencia
al Hospital de Llata.
Desde la Torre, recogió las
primeras referenciasde los galenos del nosocomio. Sostuvieron que habría una fractura del peroné, herida en la cabeza y
golpes en el cuerpo, no se descartaba que las lesiones fueran mayores, lo cual
determinaría las radiografías. Pero dado a la gravedad del herido, se
preparaban para transferirlo a Huánuco.
Madre del herido sentía dolor de cabeza con la fuerte impresión - Foto: YR |
Sin embargo, el traslado no se
podía hacer de inmediato, porque Wilfredo
no estaba asegurado en el Seguro Integral de Salud. Ante la doble
preocupación, la pobre madre, Valeriana Ávila, rompió a llorar. Su hijo, que el jueves 2, había cumplido 22 años
estaba gravemente herido y no podía solventar los gastos de curación. Contó
que ella creía que Wilfredo, recientemente vuelto de Lima aCanchapampa, se
encontraba jugando su “pichanguita” como todas las tardes, no obstante la mala
noticia la sorprendió cuando preparaba la cena.
El subprefecto de Huamalíes, Luis Barrantes Díaz, se encontraba en el
Hospital de Llata, pese a que no son sus funciones, tratando de ayudar a la
humilde familia que no tenía dónde llegar en Huánuco. Mediante
llamadas telefónicas intentó comunicarse con el alcalde provincial, Ciro
Trinidad, para que mediante la Unidad Local de Empadronamiento de la comuna, se
garantice la afiliación al SIS.