Dicen que dios perdona el pecado pero no el escándalo. La agresividad de
algunos trabajadores de la Municipalidad Provincial de Huamalíes para con este
bloguerito, luego de la publicación que hizo Desde la Torre y otros medios es un
síntoma de algo grave, encubrir lo amoral. Es como quien dice, déjame jaranearme
pues imbécil, ¿con tu música, con tu plata? ¿Qué otra explicación habría para
atacar al mensajero?, que lo único que hizo es publicar lo existente y buscar
respuestas, porque ojo acá, no me vengan con que el audio está manipulado o
tergiversado. Ni el más gilipollas te atraca eso. Son la voz y sentimiento de
la regidora Ketty Sánchez y su compinche Russel Martel. Eso hace pensar que
quizás no debí meter la mano en el avispero, ¡vaya avispones!
Lee más: PISAR TIERRA Y ANDAR DESCALZO
Por Yonel Rosales
VIDEO DE LA AGRESIÓN: https://n9.cl/tf56
VIDEO DE LA PROHIBICIÓN DE INGRESAR A LA MUNICIPALIDAD: https://n9.cl/sk5z
A estas alturas he perdido la
cuenta de las entrevistas y notas publicadas por mi autoría. No solo en este espacio.
En ese lapso he sufrido agresiones, varias veces, creo también perdí la cuenta.
Generalmente la turbamulta contra los
periodistas nos caía por familiares de confesos delincuentes capturados por la
Policía, que no quieren que les tomen fotos porque de todos modos saldrá en las
policiales. Aún recuerdo el rocón que nos cayó por fotografiar al detenido
por prácticas abortivas. Muy pocas veces vienen de parte de autoridades, porque
supuestamente son “autoridades”, y por lo general vienen de autoridades alejadas
de la transparencia y el control, de provincias donde están acostumbrados a que
nadie les cuestiona un ápice lo que hagan en su chacra; cuando eso sucedía era
un escándalo, incluso motivaba la unión de colegas periodistas en un programa
especial de solidaridad y censura contra el autor. Es una suerte de reacción,
el único arma, que tenemos los periodistas, es seguir publicando, donde, de la noticia nimia que iba a dar la
autoridad pasa a ser escandalosa, una bombaza, la actitud del sujeto y sus
adláteres.
En el caso de los audios de la
supuesta corrupción en Llata pasa lo mismo. Con un simple pronunciamiento del alcalde Ricardo Tello, e incluso de lucro
político, quedaba bien. Pero que su personal de seguridad me jalonee por
pedirle permiso para tomarle una foto y luego quitarme la cámara y el alcalde
no dice nada, opta por esconderse en su oficina; como quien dice: hagan lo
que tengan que hacer, denota mucho de su compromiso con sus regidores afines. La
escena me recordaba a la mafia de la película El Padrino, donde Sonny Corleone,
si no me equivoco, quita la cámara al periodista y lo pisotea por haber tomado unas fotos.
Algunos mentecatos y otros por ser
familiares de los implicados, se han atrevido a cuestionar mi actitud de
protesta. ¿Qué debí hacer ante el
arrebato de mi celular, irme calladito como si nada pasara?, ¿dejar que me
desalojen cual un delincuente cuando otros son los que están bajo sospecha? Claro,
mi reclamo que va a ser entendida por sujetos por lo único que fueron
contratados es por saber obedecer órdenes, en muchos casos, analfabetos
diestros en la matonería, como el tal Félix.
Esta reacción es típica cuando ven amenazados
sus faenones. Sino miren la reacción del fujiaprismo, cómo insultan, difaman,
agreden física y verbalmente a los periodistas de IDL-Reporteros que develaban
los actos de corrupción. Eso es atacar al mensajero. La ventaja o desventaja en
mi caso, es que en Huamalíes casi soy un sabueso solitario, pero con la
gigantesca solidaridad de la gente, algunas cuentas anónimas del Facebook,
amigos y colegas periodistas de la región. Con
decirles que la nota titulada “Crónica de una fresca lechuga”, ha tenido más
lectores que “Regidores piden tres mil soles a empresario”, con una gran
diferencia, muestra el interés por la reacción de los agresores.
Ese datito, indica algo importante, el público no solo quiere el que,
también el cómo, buscar respuestas a las otras preguntas. Justamente
por querer profundizar el hecho, nos agredieron y ahora último nos desalojaron
de la Municipalidad de Huamalíes, sin ninguna orden judicial cuando queríamos
asistir a la sesión de concejo, tendremos que encarar personalmente al alcalde,
con una cámara encendida por ordenar la restricción. - ¿Creo es un “reconocido”
abogado el que dirige el pliego no?, ¿qué base legal ampara impedir el ingreso
de la prensa a una entidad pública señor Ricardo Tello?, explícamelo y dejaré
de ir - También por buscar respuestas y demorarnos en Radio Llata, nos ganaron
en la publicación en las redes, mientras buscábamos a los implicados las
cuentas anónimas ya habían publicado el audio, es decir si no era yo, cualquier
otro lo publicaba. ¿A qué mensajero
habrían crucificado estos violentos? Algunos aplaudirán el abuso contra este bloguerito, generalmente los que son de la misma calaña, pero tengan en cuenta que por unos cuantos hay cientos solidarizándose.