Mañana publicamos el video... y otra nota más sobre la frescura de uno de los implicados... qué linda lechuga
Tras la presunta amenaza de muerte
contra el alcalde de la Municipalidad de Huamalíes, Ricardo Tello, anda
resguardado de personajes de dudosa reputación, que la gente los conocen como los matones de Tello,
quienes agredieron en presencia de la autoridad luego que intentara entrevistarlo por el escandaloso audio en el que
dos regidores estarían incurriendo en corrupción. El trabajador nombrado de la
comuna y jefe de Serenazgo, Félix Medrano Benites, fue quien propinó el puñete.
Pese a que en presencia del
alcalde me agreden y me quitan el celular, la autoridad se escondió en su
oficina, como quien dice: hagan lo que tengan que hacer. Parece que metimos la
mano en el avispero. En horas de la noche fuimos agredidos por otra trabajadora Andrea Dávila, eso les contaremos después.
Por
Yonel Rosales
Ayer, cuando un periodista de Correo acudió a la Municipalidad de
Huamalíes, para buscar el pronunciamiento del alcalde Ricardo Tello Inocente, respecto
a los audios de presuntas prácticas corruptas de dos regidores, Ketty Sánchez
Ocaña y Russel Martel Rojas, que hablan de tres mil soles para cada regidor, el
personal de seguridad del alcalde y Serenazgo terminó agrediéndolo físicamente
y desalojando de la entidad al hombre de prensa o sea yo, luego que no
quisiera responder sobre los hechos que también involucran al titular del
pliego.
Todo sucedió después que el alcalde manifestó escuetamente que Procuraduría
Municipal denunciará el caso y se negara a dar una entrevista a la salida de su
oficina. Entonces, el periodista yo pues le consultó si podría
tomarle una foto, pues en la prensa se necesita tomas de apoyo, sin embargo
saltó violentamente un personal de seguridad (sería el señor Edgar Silvestre
Polimar) empujándolo y quitándole el celular sin que haya grabado nada. Como yo el reportero tenía otro
celular, empezó a grabar y el alcalde se escondió en su despacho, mientras que
su matón huye llevándose el celular, para presuntamente borrar las imágenes.
Ante el reclamo airado de varios minutos a la puerta del alcalde, una de
sus secretarias devolvió el celular, que no contenía ninguna grabación, porque
si no la publicaríamos. No obstante insistimos que Ricardo Tello, nos responda
por qué nos agredían sus matones, a
cambio de dar la cara el alcalde, acudieron más efectivos de seguridad y
Serenazgo, a quienes no les gustó que reclamáramos por el desalojo y
uno de ellos, tal como se muestra en las imágenes terminó por golpearle en la
cara. Y cuando lo confrontamos con el celular, como se muestra en las imágenes,
corrió a esconderse en el baño de mujeres.