La semana pasada hubo un movimiento sísmico en la Municipalidad de
Huamalíes, cambiaron repentinamente algo que ya se veía venir pero lo
decimos repentino porque ni las gracias le habrían dado al exgerente Arturo Bajonero, hermano del ganador
de las elecciones, Wily. Pero la réplica fue más fuerte cuando se conoció los
antecedentes de su sucesor Luis Huaranca, investigado por el delito de peculado
y negociación incompatible. Tello, no necesita de opositores, le basta y le
sobra con el harakiri, y te lo decimos por qué.
Inestabilidad total en la Municipalidad de Huamalíes, funcionarios abandonaron a Tello - Foto: Yonel Rosales |
Por Yonel Rosales
“Muchas autoridades creen que la municipalidad es como su casa, quieren
manejarlo a su antojo”, nos dijo Luis Yunior Huranca Hualpa al explicarnos por
qué estaba inmerso en una acusación de la fiscalía del caluroso departamento de
Ucayali, por el delito de peculado y negociación incompatible, por cuyo
caso, su exjefe, el exalcalde de la Municipalidad Distrital de Manantay, Said
Torres Guerra terminó preso, aunque ya fue liberado, aún no se libra del
proceso que está en la fase de investigación preparatoria, el cual también
persigue al exgerente municipal de Manantay o de Huamalíes también.
Luego que indagáramos por aquí y
por allá sobre el CV del anunciado nuevo gerente de la comuna huamaliana,
logramos comunicarnos con Luis Huaranca. Un tipo buena gente, desde el lado
periodístico. Y las primeras líneas del párrafo anterior, resumirían lo que
sucedió en Manantay, le achacan un delito en el que no tuvo parte, pero que le
imputan por ser el gerente… a veces pasa, por más que estás en el círculo uno
no sabe lo que hacen detrás. Su exjefe,
no le habría hecho caso, que la plata de la muni no se podía manejar como si
saliera de su billetera, fue así que Said Torres habría derrochado la caja
chica del municipio de 20 mil soles mensuales. “Como gerentes tenemos
cierta responsabilidad funcional”, afirmó, pero nunca habría hecho uso de ese
dinero, y lo implican por no haber “accionado supervisiones”, acotó.
Tras despido de Arturo Bajonero, varios funcionarios abandonaron la comuna en solidaridad con el cesado, Tello Cada vez más solo - Foto: Yonel Rosales |
Luego de darnos una larga
explicación, nos dijo lo más importante para lo que concierne a Huamalíes. Que
a raíz de ese proceso ahora aprendió, así nomás no acepta cargos de confianza,
si el alcalde no se deja conducir como corresponde, a otra cosa mariposa. Fue
así que aceptó el cargo de gerente municipal de Huamalíes, tras revisar el currículum del alcalde Ricardo Tello Inocente, decidió
ingresar en reemplazo de Arturo Bajonero. Sin embargo, le salieron con su
proceso judicial, y lo más importante, según dijo, es que en Llata hay un clima enrarecido de
conflictividad. Algo así como una batalla entre los malos y los buenos, no
sabemos de qué lado están quién o quienes,
lo cual imposibilita una gestión exitosa. “Encontré un clima
conflictivo, los regidores se enfrentan. Así no se puede gobernar, se tiene que
concertar”, afirmó, por lo que decidió renunciar. “El lunes presentaré mi renuncia”, declaró, y el alcalde ya lo sabe,
añadió a nuestra repregunta.
EL HARAKIRI DE TELLO
Quizás hayan escuchado qué es el
harakiri, para los que no lo saben, es una ceremonia del suicidio japonés. En
este trance estaría el alcalde Ricardo Tello con el cargo que tiene.
Primero. Con la contratación de su prima Elida Caballero Tello hasta
parece me tía por el apellido, tío Tello dame chamba, parece que yo también soy
tu sobrino. A no ser que haya
poderosas razones en contra, la vacancia de Ricardo Tello está más cantada que
mariachi en serenata, del cual es responsable él, porque su firma está al
costadito de la firma de su prima, con doble culpa, porque es abogado. También
nuestras fuentes nos informan que habría más familiares trabajando en la muni,
pero que son de quinto grado.
Ortíz también habría renunciado, quien se lució en la última presentación informativa de los cien días - Foto: Yonel Rosales |
Segundo. Si al primer paso le faltaba caos y drama, lo añadió el propio
Tello, botó a Arturo Bajonero, después de cuya salida, se vinieron otras
renuncias de gerentes, eso sin contar las otras salidas antes del cese de
Bajonero. ¿Cómo vas a hacer eso, tirar todo por la borda, si recién empiezas?
Lo único que genera es desgobierno, inestabilidad, caos, como si recién
empezara su gestión. ¡No te pases pues! Además de no darle las gracias, no le
habría explicado cuáles fueron las razones de su repentino despido. Si hace
poquito el alcalde nos dijo que había paz y amor.
Esperemos
que la anunciada renuncia del gerente municipal Luis Huaranca se concrete, digo
esperamos, únicamente para que no nos haga patinar, el resto ya se entenderán entre
blancos, según anunció a Desde la
Torre, “ya no labora” desde el último viernes en la comuna de Huamalíes. Ahora a
buscar otros funcionarios. No sabemos quiénes vayan a asumir los cargos de
confianza. Si están enterados de la vacancia en curso, dudo que se
aventuren. Hasta su asesor legal, en quien “confiaba ciegamente”, habría
abandonado a Ricardito.