Cuando el alcalde discursea, en su radio favorita, sobre la cobardía, los promotores del paro en contra suya, me salió una risita irónica. Ciro
Trinidad, hablando de cobardes, cuando tiene una medida justa, constitucional. Como
dice el dicho, el burro hablando de orejas. Sin embargo, ¿un paro solucionará el problema de
gestión? No creo, lo que sí, está consiguiendo el alcalde, es dividir a los huamalianos.
La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, el alcalde despotricando contra "cobardes amenazas" - Composición: YR |
Por Yonel Rosales
Viernes 10 por la mañana, oigo brevemente en el receptor del
carro, al alcalde de la Municipalidad
Provincial de Huamalíes, Ciro Trinidad
Rojas, despachándose de lo lindo, en su radio favorita, ¿con su gerente
favorito o periodista favorito?, contra los promotores del paro. El
imparcial periodista, de incisivas interrogantes, termina despidiendo a su
jefe, luego que criticara, pontificara sobre amenazas de cobardes. ¿Peeerdónnnnn
wuuuuuhatssss?
No es que quiera vanagloriarme de nada, pero al parecer,
nuestra denuncia, que amenazar, responder con violencia ante una pregunta mía,
es de cobardes. Mi mensaje caló en el alcalde Trinidad. No respetar la libertad de expresión, amenazarme cual placera, botarme de
la comuna huamaliana, con tus ujieres a mando como si se tratara de tu chacra;
protegerte, esconderte de la cámara tras la fuerza bruta a tu disposición, también
es de cobardes señor alcalde. ¿Se dio cuenta? Un abogado, mejor que nadie,
repito, ante una difamación, procede denunciando al trasgresor y no responde
con golpes. Pasa que no soporta la discrepancia cachacienta, y termina siendo
eso, que ahora usted señala con los cuatro dedos en contra, erradamente,
cobardes a los promotores del paro.
Usted, señor alcalde, como abogado, también debe saber, que
el derecho a la protesta está protegido constitucionalmente, artículo 2, lo que la CPP no se preserva es la agresión
física. No es que de pronto, se sensibilizó, ni que mi mensaje sobre los
cobardes haya llegado a sus oídos receptivos; en vano me echo flores se trata de sus conveniencias, le toca el
papel de victimización, ante un justo reclamo.
Claro que un paro no soluciona los problemas de gestión. Con
un paro de dos días se genera inestabilidad, ruido político; ralentizamos las
actividades. Pero, es una justa medida, el último recurso de presión ante la
falta de atención. Ya en marzo,anunciaron una medida de fuerza similar con los mismos actores, con la mismaagenda: electrificación. Logró sofocarlo oportunamente, con promesas y
compromisos, que según el presidente de la Asociación de Alcaldes de Centros Poblados de Llata, Marco
Rivadeneyra, incumplió. Tampoco abrió las puertas al diálogo, pese al documento
presentado por los promotores a su despacho.
Por el bien de nuestra tierra, la mejor medida es el consenso, sentarse a la mesa y entablar diálogo.
No obstante, el diálogo sin resultados, también hace perder la paciencia, más,
si la contraparte no reconoce el error y sale a despotricar. La muestra
palmaria de su exitooosssa administración, lo tienen en la plaza de Llata, la construcción del Palacio Municipal, con
todos los plazos vencidos, ¿qué acaso las obras no tienen plazo de ejecución?, ¿el
empresario puede entregar la obra cuando le da la gana?, ¿quién asume el costo
económico?, ¿usted señor alcalde?, ¿la plata para el alquiler de local para
que siga funcionando el municipio, sale de su bolsillo? El costo político lo
tiene que asumir; ya sé que es otro tema, pero así estamos en casa, con la obra
más significativa para la ciudad.
Lo preocupante es que insiste
en la polarización de los buenos que comparten los recursos con los distritos y
los malos de Llata, los llatinos centralistas, el dinero lo quieren únicamente para ellos. Eso es
lo que rebotan y repiten sus acólitos, sus bufones sin gracia, que ahora lo
aúpan, y serán los primeros en abandonarlo cuando termine su gestión. Lo cierto es que, los pueblos de la capital
LLata y de los distritos, únicamente
buscan lo mejor para ellos. Usted se empeña en enfrentarlos. Con tu brega,
Llata contra los distritos, enfrentas a
los hermanos, solo por salvar el pellejo. Señor alcalde, no puede seguir
con ese discurso dañino, xenófobo, si se quiere, las consecuencias son impredecibles
y a largo plazo. Eso es irresponsable. Se supone que el espacio para superar
estas debilidades, es el presupuesto participativo. De acuerdo al señor Rivadeneyra,
lo único que piden es que se cumpla lo establecido en esa estancia.
Su posición agresiva, que lo conozco, cobarde;
instigada por el miedo a una protesta, que aseguran será pacífica. Escuché a un
viejo, reclamar molesto ante la insinuación de bloquear vías. Únicamente lo
llevará a un clima de agudización del conflicto. Si maneja adecuadamente el
conflicto, todo saldrá bien, el diálogo
a tiempo evitará protestas poco productivas, a diferencia del consenso. No puede continuar dividiendo a llatinos
con los puñosinos, miraflorinos, jacasinos, y el resto de los huamalianos,
te lo dice un puñosino. Los hermanos no podemos estar enfrentados por los
errores propios que todos cometemos, pocos escarmentamos, hasta un megalómano
agresivo puede sorprender.