Pese a la gran relevancia que tiene las fiestas
patrias en Llata, a donde concurren los huamalianos de diversas partes, además de
turistas, el alcalde de la Municipalidad de Huamalíes Edgar Céspedes no se habría
preparado para dar su discurso y se vio obligado a cortar su intervención ante
el abucheo del pueblo.
Alcalde Edgar Céspedes se perdió en su laberinto discursivo y tuvo que terminar ante pifias - Foto: Yonel Rosales
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Por Yonel Rosales
“Hermanos y hermanas de Llata. A todos ustedes hacerles llegar un saludo cordial. Huamalianos y huamalianas. Quiero hacerles llegar un saludo cordial, fraterno, de tu alcalde, a propios y extraños que hoy están en la plaza de armas. Unidos, juntos para vivir nuestra tradición”, son parte de las palabras del alcalde de la Municipalidad Provincial de Huamalíes, Edgar Céspedes Salas en la fecha central de las fiestas patrias por los 202 años de independencia. Este fragmento lo dio después de ensalzar a tres o cuatro señores de apellido Céspedes, suponemos su familia, por ser “distinguidos hombres de nuestra tierra”, en seguida citó al representante policial y al consejero Ricardo Prado, quienes entre magros aplausos se sentaron.
Pese a la trascendencia que tienen estas fiestas en Llata, Céspedes no dijo nada relevante. Aparte de pedir la bendición para todos, dijo: “decirles también, estamos pre, hemos preparado una serie de actividades. Siempre en función, respetando… siempre… invocando a nuestro bendito señor, que derrame sus bendiciones y que en todos los actos celebratorios nos vaya bien”, afirmó en los minutos siguientes, entre vacíos e incoherencias como podrán notar en la cita parcial que transcribimos. Continuó resumiendo la feria, el yalinacuy (competencia de danzas), etc… lo que es obvio.
Municipalidad de Huamalíes presidió actividades por fiestas patrias - Foto: Yonel Rosales
“Estamos saliendo de tiempos difíciles. La pandemia que se llevó a muchos vecinos huamalianos. Hoy nos encontramos reactivando la economía, reactivando… diferentes actividades culturales cívicos. Y hoy nos sentimos bien, felices en nuestra plaza de armas, aún, nuevamente voy a decirlo recuperado. Que esta mañana, nuestro desfile…” cuando el alcalde Edgar se perdía en su laberinto del discurso central comenzaron las pifias. Sus palabras eran tan ligeros que a uno que otro regidor le dio sueño.
Ante tanta concurrencia del público
se esperaba algo más elaborado, de repente que la autoridad destaque alguno de
sus proyectos que contribuye al desarrollo de la patria o un pedido de
disculpas por el escándalo en que estuvo envuelto con la querida intervención
policial por los daños ocasionados a la camioneta de la Municipalidad de
Huamalíes. Pero nada. Solo el discurso del maestro Javier Fonseca reflejaba
con empatía la realidad nacional, pues calificó de gobierno ilegítimo la
presidencia de Dina Boluarte, además de sindicar la corrupción en Huamalíes.
Algunos cabeceaban en el desfile por fiestas patrias - Foto: Yonel Rosales
Luego de las pifias del público que
obligó a Céspedes con terminar sus vaguedades y lagunas, al parecer cansados de
esperar a los tardones con la resaca de la verbena. Intentamos
sacarle algo que rescatar al gerente municipal, Alberto Contreras, autoritario,
casi nos quita la grabadora… pero eso es
parte de otra nota.
