¿Podríamos elegir peor?, sí, la
evidencia demuestra que siempre podemos superarnos para más peyor peor.
Eso explica la elección obligada que haremos entre, lo que algunos ya adelantaron
alegando a la famosa frase de nuestro nobel,
Mario Vargas Llosa, elegir entre el cáncer y el sida, Luis Picón o Juan
Alvarado será el gobernador regional de Huánuco. ¿Cómo llegamos a esto?,
como siempre, no sabiendo elegir, para luego descaradamente culpar a la
reelección o años de gobierno, como lo hacen los más cínicos políticos a
quienes detestamos pero nos parecemos a ellos, ¿ven?, tenemos los gobernantes
que nos merecemos. Obligados a elegir
entre los dos, la campaña o la guerra sucia del que se cree león ya comenzó,
para convencernos que los dos son iguales.
Obviamente la presa somos nosotros, la región Huánuco - Foto: Facebook, Revista Proactivo y Videos - animales.net |
Más en un clic: ¿POR LOS OCHO AÑOS DE GOBIERNO?
Por Yonel Rosales
Teníamos mejores opciones para
gobernador regional, pero Rodolfo
Espinoza, su desorganización y ego lo dejaron lejos, lo anticipamos en estas
líneas, una improvisación con candidatos provinciales y distritales armados con
los últimos retazos. Mientras que Pier
Marzo, fue el primer paso ambicioso fuera de lugar, debió postularse para
alcalde de Huánuco, y posteriormente para gobernador; sin logística, sin
candidatos, sin cuadros, quedó entre los últimos.
¿Qué aventajó a Picón y Alvarado frente
a los candidatos más presentables? Al
primero el aura del “roba pero hace obra”. Así de buenas gentes somos con
la corrupción, luego nos quejamos de nuestras desgracias. Su principal discurso
fue la ejecución de obras millonarias como cancha e intenta tapar las presuntas
irregularidades, también, como cancha. Es un personaje conocido, anhelado
porque gobernó en la época de las vacas gordas, ahora que el Perú está en la
etapa de las vacas flacas, para la población los culpables son los que le
sucedieron como autoridades. Sumado a
esto, el perfil populista, los lazos electorales, organizativos y de logística
lo catapultaron a la segunda vuelta. También está la cuota de Rubén Alva, tanta
expectativa de cambio, para parecerse a quien criticó. Ineficaz, varias obras
iniciadas con Picón siguen sin concluirse.
Al don Juan, lo único que posiblemente lo lleve al sillón regional, son las
buenas dosis de ubicaína. Una fuente me informó, cuando se reunían los
candidatos provinciales y distritales, ahora en su mayoría alcaldes electos en
una importante provincia, se apareció para las fotos sin ser invitado. Ni ellos
lo querían por su pasado. No fueron muy entusiastas en promocionarlo porque él
también prometía y no cumplía sus compromisos. Sin embargo, la fuerza del arrastre de los votos distritales
y provinciales ayudó a Alvarado. Tener candidatos a nivel local que por él no
votan ni sus familiares, es fatal, no ayuda a ser conocido al aspirante
regional, por quien votarán sí o sí, aún sin saber nada de él, siempre en
cuando su logo y nombre haya sido promocionado. Otro factor a favor del
candidato de la pala, aparte de ubicarse
en el lugar exacto con un partido político, Acción Popular, aparentemente limpio
frente al miasma que nos rodea hoy, es el tiempo. El mejor aliado de los
políticos cuestionados en el Perú, es el paso del tiempo, los peruanos somos
desmemoriados y fácilmente perdonamos; ejemplos sobran, reelegimos a Alan
García, pese a que destrozó el país.
Si googleamos, sobre denuncias
contra Picón y Alvarado, el primero será el campeón, no porque el segundo sea
más santo que el otro, sino por el paso del tiempo y la modernización. Cuando
el candidato de Acción Popular, en ese entonces presidente del CTAR, hoy
Gobierno Regional de Huánuco, recién iniciaba la explosión informativa que
ahora tenemos con las redes sociales, por lo que sus chicharrones y anticuchos estarán apolillados o amarillentos en
alguna hoja de papel que ya pocos recordarán, o se perdió en la tradición oral.
Por eso es que los antecedentes de
Alvarado, no son saltantes como los de Picón.
En ese contexto, Picón, que se
alucina león; no directamente él, sino su entorno y sus troles, desataron la
guerra sucia, burda, al mismo estilo desubicado de los fujitrolles. Sus memes o
fake news carecen de base para ser creíbles, se desmoronan al menor análisis. La estrategia de Picón es positivo para sus
fines, igualar al supuesto candidato de la honestidad a su condición, terminar
por convencer al electorado que Alvarado es tan igual o peor que él, puede
funcionar siempre cuando haya sustancia, una exitosa investigación del pasado,
acudir a los testimonios de los exhombres de confianza, hallar los polvorientos
periódicos de ayer. Pero su guerra
sucia, no va a funcionar cuando se inventan ese video en el que supuestos
acciónpopulistas meten billetes de diez soles en cajitas de fósforo antes de la
elección, eso, hasta, podría resultar contraproducente, que ayuda a victimizar
al rival. O lo de los millones de soles que dio a sus candidatos
provinciales, entre ellos a Wily Bajonero. La buena noticia para Picón, es que
Alvarado está cayendo a su juego, respondiéndole en el tono de ¿quién tira más
barro? Además que este, carece de muñeca política.
Como que león no es, quien sin
pérdida de tiempo desató la guerra sucia con mala carroña, más parece hiena carroñera,
que va tras la presa que otro ya casi lo tiene seguro, para parecerse a león,
Picón, tendrá que ir por su propia presa.