El subprefecto provincial, Robery Aguirre, manifestó su indignación por el escandaloso hecho en que profesionales sanitarios de EsSalud y de la Red de Salud de Huamalíes fueran detenidos por violar la emergencia sanitaria en dos juergas. Dijo que la actitud de los implicados es inaudito, ya que se trata de personas que deberían dar el ejemplo a la población, por lo que deberían ser destituidos.
Nada contemplativo con profesionales de la salud que deberían ser ejemplo para la población en cumplir el estado de emergencia - Foto: Yonel Rosales |
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Por
Yonel Rosales
“Lamentable la actitud de los profesionales de la salud, mire por donde
se mire, es reprochable. Todos coincidimos manifestando nuestro total rechazo y
repudio, la calidad de formación, la calidad de profesionales, asignados a
defender a proteger nuestra salud”, declaró el subprefecto de
Huamalíes, Robery Aguirre Olivas, al pronunciarse sobre la intervención a
quince personas, entre médicos, enfermeros, odontólogos, obstetras, libando
licor el último fin de semana violando la emergencia sanitaria. Sostuvo que
este es repudiable, mientras el gobierno lucha por reducir los contagios por el
covid-19, a otros les importa poco. Cuestionó que a nivel nacional, nuestra
provincia haya quedado mal vista por la difusión en los diferentes medios de
comunicación del escandaloso hecho.
Pidió que se inicie procesos administrativos, con una investigación
prolija, “y de ser posible que se destituya a esos profesionales
irresponsables, que juegan con la salud pública de todos quienes acudimos a los
nosocomios”, exhortó. Fue más allá, pues estimó que esta actitud
irresponsable calificaría como delitos, “esperamos que la sanción en la vía
penal caiga con todo el peso que corresponda”, sugirió.
Consultado por la actitud contemplativa
de la directora de la Red de Salud, Nakia Mendoza, que afirmó que no estaba
para criticar a los intervenidos por la Policía
porque sucedió fuera de su horario de trabajo, el representante del
presidente de la república, expresó su desacuerdo. “Aquí corresponde que la entidad, de oficio, inicie, mínimamente un
proceso administrativo disciplinario para que estos hechos se aclaren”,
reclamó. “Los profesionales de la salud además de cumplir con un horario de
trabajo, ellos deben evidenciar una conducta ética que les caracterice como
guardianes y protectores de la salud. Siendo así no pueden andar exponiéndose
al virus”, afirmó aludiendo la Ley 27815 del código de ética de la función
pública, que efectivamente contempla estas condiciones para un trabajador del
Estado, que la autoridad provincial afirma.