Pese al avance tecnológico y la
modernidad de estos tiempos Electrocentro, sigue repitiendo la vieja fama sobre
las empresas públicas, ser ineficientes. Para una simple instalación de nuevo suministro eléctrico se demoran has
siete meses, práctica sería común según otras víctimas versiones.
Empresa Electrocentro entrega servicio cuando le da la gana sin cumplir sus propios plazos - Foto: Cortesía
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Por Yonel Rosales
Los indicios revelan que algunas empresas públicas
como Electrocentro, siguen repitiendo viejas prácticas de los años 80, que han
construido la fama: empresa pública es igual a ineficiencia. No obstante
al avance de la tecnología y la modernidad que caracterizan a las compañías de
hoy, a diferencia de épocas pasadas donde se carecía de insumos y materiales, la
empresa de luz tiene una pésima gestión que se te demoran “una eternidad”, para
una simple instalación eléctrica.
De acuerdo al testimonio de un usuario de la provincia
de Huamalíes, Electrocentro se demoró siete meses para entregar el nuevo
suministro eléctrico, cuyo trámite comenzó en el mes de octubre del 2020 y
recién en mayo de este año dieron el servicio. Aunque es
cierto que al cliente le hicieron observaciones para que instalen el nuevo
medidor de luz, pero el personal de la empresa no cumple sus plazos en que
debían retornar para subsanar la objeción, con lo cual acortarían el tiempo de
instalación. Vuelven por el proceso luego
de mucha instancia y reiteradas visitas a sus oficinas.
Finalmente, cuando logras firmar el contrato en las
oficinas de Electrocentro Huánuco, acudiendo desde una zona rural, con un viaje
de aproximadamente seis horas, los quince o 20 días de plazo para la
instalación del servicio, tienes que insistir reiteradamente para que por un
milagro, se cumpla lo pactado en el contrato. De acuerdo al testimonio de otras
personas que hicieron el mismo trámite, manifestaron que la demora de la
empresa es lo normal. También en las redes sociales, en la página oficial de
Electrocentro, se pudo constatar quejas de similar índole por las largas
demoras, que esta vez lo excusan con la pandemia del Covid-19. Las personas más
humildes que desconocen de reclamos, peor aún, quedan en el olvido hasta que la
empresa tenga cargo de conciencia.
