De forma efectiva y certera un grupo de comuneros de Tantamayo y Chavín de Pariarca dan un duro golpe a banda de abigeos que mediante una amplia red en varios distritos de Huamalíes robaban los animales de los sacrificados pobladores de Chavín de Pariarca y Singa principalmente. Según testigos de San Martín, población quería ajusticiar al presunto ladrón pero autoridades evitaron el castigo.
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| Sin piedad, abigeos llevaban arrimados a ovejas preñadas a punto de parir - Composición: Yonel Rosales |
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clic: HUAMALÍES QUEDARÍA INCOMUNICADO CON DERRUMBE DE CUATRO
HECTÁREAS DE CERRO
Por Yonel Rosales
En varios
centros poblados y caseríos de los distritos de Chavín de Pariarca, Singa y
Punchao, esta banda de abigeos tenían sus operadores mediante el cual sustraían
los ganados de los modestos moradores de estas localidades, hasta que cayeron en manos de los propios comuneros, que
inicialmente estaban alterados y con ganas de ajusticiar públicamente al primer
delincuente que cayó que en el caserío de San Martín, al ser intervenido por
una turba de aproximadamente 80 personas, que reclamaban les entreguen al
presunto delincuente.
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| Coyllarbambinos del distrito de Tantamayo, una vez más dan golpe a delincuentes que ya pensaban se salieron con la suya - Foto: Yonel Rosales |
Según las fuentes de Desde la Torre, los habitantes de estas localidades
estaban cansados por las constantes desapariciones de sus pertenencias, entre
ganados e incluso equipos de valor y motocicletas. De manera impensada
descubrieron a los autores. El día lunes
21, a eso de las 5:00 a.m. una pregunta de qué ruta seguir para Arancay del
conductor de un station wagon blanco a una señora del centro poblado de
Coyllarbamba distrito Tantamayo, le tomó por sorpresa, pues conocía a los
ocupantes del vehículo que continuamente viajaban por esa zona. Al notar
que llevaban cantidad de ovejas, dio aviso a las autoridades, que en esos
momentos hacían control a un señor que trasladaba dos vacunos.
Nos
contaron las autoridades de la comunidad de Coyllarbamba, intervinieron a los tres
ocupantes del vehículo, que luego se sabría que eran de Singa y Chavín. Les solicitaron documentos de la compra de los ganados
que no tenían, trataron de justificar con que ellos compraban sin mediar
contrato. Les comunicaron que los animales, entre ellos una
borrega a punto de parir y horas después trajo al mundo un hermoso huashqui, se
quedaban retenidos hasta que les llevaran lo solicitado. Les daban plazo de un
día. Pero como se trataba de avezados abigeos, estos no volvieron más, confiados
en que el caso quedaría ahí.
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| Ladrones no tenían documentos de la compra de los animales que iban a venderlos en Arancay y Jircán - Foto: Cortesía |
Vencido las horas
de espera, se comunicaron con las autoridades de Chavín de Pariarca, para dar
cuenta que el señor Lucas Landa Lastra de aproximadamente 25 y sus cómplices, habían dejado unas ovejas en Tantamayo y se sospechaba
que eran sustraídos. Ante esta noticia, los comuneros de San Martín y Chavín, con
el apoyo del subprefecto del distrito, Mequías Guillen, se valieron de los
lazos de amor para armar una artimaña a fin de capturarlo sin enfrentarse a la
familia ni ingresar a su vivienda.
Ya el martes
22, una joven se comunicó telefónicamente con el abigeo, citándole a un
encuentro en la zona conocida como Picash, el sospechoso dudó de esa invitación,
pero los encantos de la señorita terminaron por convencerlo. Cuando en la oscuridad, a eso de las 7:00 p.m., el
conquistador se dirigía al encuentro, los comuneros le esperaban agazapados
entre los matorrales. En cuanto avanzó un tramo de su vivienda, le cayeron con
todo. Mientras el intervenido pedía auxilio a gritos, su familia salió a
defenderlo, llegando a enfrentarse con las autoridades. Los habitantes de San Martín, reclamaban la entrega del detenido para hacer justicia en la
plaza, ya que ellos fueron las
principales víctimas, pero los chavinos se impusieron, como quien reclama
su trofeo.
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| En el vehículo dos cerdos robados también eran trasladados para venderlos - Foto: Cortesía |
FISCALÍA AL
RESCATE
De acuerdo a los testigos, en la subprefectura distrital, a los paisanos
del supuesto ladrón no les gustó que le trataran con delicadeza, incluso llegando
a faltar el respeto al subprefecto Guillén. Exigían que le hicieran “cantar” de
cómo actuaban y quiénes eran sus cómplices. Finalmente relató su modus operandi, pero resistiéndose a dar los
nombres de sus compinches. Desde la Torre, llegó a conocer que el cabecilla
sería un alias “Chato” de San José de Santa Rosa de Pampan. Y tenían operadores en Singa, San Pedro de Marañón
del distrito Singa, Chuquibamba (distrito Punchao), Queropata y San Juan de
Pampas en Chavín de Pariarca, con quienes articulaban los robos de ovejas,
chanchos, vacas y hasta ya habían hurtado tres motocicletas.
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| La policía no pudo rescatar al delincuente confeso porque los vecinos se lo impidieron, pero volvieron en horas de la noche - Foto: Yonel Rosales |
Aunque inicialmente se habría negado citar los nombres, el frío del
calabozo y el estigma le habrían hecho cambiar de idea. Finalmente delató a
quien tendría parte en San Juan de Pampas. Le hicieron cariar sobre el hurto de
motocicletas y habría quedado claro que los vehículos están en Singa. Cuando las investigaciones avanzaban hubo
un primer intento de la policía de rescatar al presunto delincuente, pero los chavinos
le impidieron. No contaron con que más tarde volverían con más refuerzos y representantes
del Ministerio Público, prácticamente para salvar al sospechoso. “suhua casirami
musash chaquintapis fiscaltaga” dijeron Como es sabido los delincuentes son
liberados por la Fiscalía y la Policía juegan
al proceso y lo archivan por vaya a saber usted cuáles son sus poderosas
razones, por eso es que la población desconfía de la efectividad de la
intervención de estas instituciones y prefieren ellos mismos saldar cuentas.
Por esa misma razón, en un hecho reciente en Tantamayo, la víctima de un asalto
prefirió no dar parte a la Policía y arreglar por su cuenta el caso, llegando a
recuperar todo su dinero.
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| Las víctimas que perdieron equipos de valor y sus animales querían ajusticiarlo públicamente según nos narraron los indignados - Foto: Cortesía |
Consultado por
este último hecho, el subprefecto distrital Mequías Guillen, dijo que la
población le exigía no liberar al confeso autor de abigeato. Sin embargo, la
fiscal Maritza Monalaya, no habría entendido la amargura de las víctimas que
pierden sus animales que crían con
tanto esfuerzo, por lo contrario lo habría reprochado, abogando por la libertad
del pobre ladrón. Sin comprender que el subprefecto ya había evitado el
linchamiento del delincuente.
